Las atracciones extremas, aquellas que tienen mayores alturas, pendientes, riesgo, generan en la gente sentimientos encontrados.

Para algunas personas producen una sensación de miedo terrible, para otros son totalmente adictivas e incluso hay para quienes son una atracción más, sin darle mayor importancia.

Nos encanta que haya gente adicta a subirse a Verti-Go, que no pueda evitar deslizarse una y otra vez por uno de nuestros dos toboganes a 33 y 42 metros de altura. Esa gente que hace las colas que hagan falta para poder sentir en su piel la aceleración gravitacional de más de 100 km hora que produce nuestra atracción estrella. Gracias a todos los que sois fans incondicionales y necesitáis esas dosis de adrenalina que os proporciona para disfrutar al 100% de un día inolvidable con nosotros.

Pero entendemos que no todos somos iguales y a todo el mundo no le gusta este tipo de atracciones radicales, para ellos tenemos otras más moderadas donde siempre se disfruta y se pasa bien con familia y amigos: Pistas Blandas, Zig-Zag, Rápidos, Splash, Niágara, Black Hole o el Gran Jacuzzi Iguazú. Sin duda, son de las más famosas entre nuestros clientes.

Sin embargo, cada año vemos que muchos de vosotros os encontráis entre la gente que disfruta con las emociones fuertes pero le impone respeto e incluso le puede llegar a dar miedo una atracción extrema. Venís, nos preguntáis, y a veces os decidís y otras veces no. Nuestros socorristas y el personal del parque siempre estará para aconsejaros y despejar vuestras dudas y debéis de ser vosotros los que decidáis si os tiráis o no por nuestras atracciones extremas: Verti-Go y Big-Bang.

Si os lo estáis pensando, y os falta lo que suele llamar ‘un empujoncito’, os lo vamos a dar, pero de forma virtual con una serie de consejos que podéis seguir para vencer ese miedo, para conseguir un poco más de confianza.

Lo primero que tenemos que hacer es analizar de dónde viene el miedo que tenemos a la atracción; puede ser por miedo a las alturas, vértigo, por miedo a que se estropee algo, a que falle algún mecanismo, a caer mal a la piscina…

Si tienes miedo a las alturas o vértigo, no podemos ayudarte mucho, pero puedes acudir al médico y tratarte, ya que en muchas ocasiones es algo que se pasa con el tiempo y el tratamiento psicológico adecuado.

Para aquellos que sufrís por la seguridad de la instalación, por caer bien o mal etc., a vosotros esperamos poder ayudaros con lo que os vamos a contar. Lo primero es que como sabéis todas las atracciones de Aqualandia han pasado por los más estrictos controles de seguridad y son revisadas a diario por nuestro personal. Una atracción no se pone nunca en funcionamiento hasta que se comprueba que está en perfecto estado. Además, en todas ellas se encuentran nuestros socorristas para explicaros cualquier duda que podáis tener sobre el funcionamiento, la seguridad, etc.  A la hora de tiraros serán ellos los que os den las indicaciones, si las seguís no tenéis por qué preocuparos, caeréis a la piscina perfectamente sin pasaros nada.

Otro de nuestros consejos es que no os lancéis sin más a las atracciones extremas si tenéis miedo. Es bueno hacer las cosas de forma progresiva, una vez las atracciones moderadas son ‘coser y cantar’, subirse al Big-Bang y dejar Verti-Go para el final.

Enfrentarse al miedo en compañía siempre será mejor. Ves a las atracciones con alguien de tu total confianza y si es una persona que se ha tirado por ellas en otras ocasiones mejor, siempre te hará sentir más seguro y decidido.

Y por último, y lo más importante: si no te tiras no pasa nada. Es bueno vencer los miedos y en Aqualandia hay atracciones únicas que vale la pena probar, pero todos somos diferentes y cada uno tenemos respeto y miedo a cosas diferentes, no pasa nada. Si no te tiras por una atracción lo harás por otra, lo importante es pasar un día inolvidable en el parque.