El verano en la Costa Blanca no acaba en agosto, y es que el buen tiempo da una larga tregua en la que se puede aprovechar para seguir disfrutando de la familia y de los amigos. Los planes en grupo son mejores planes cuando se trata de pasarlo bien y compartir experiencias emocionantes e inolvidables. Pero, ¿qué actividades son las más recomendables para realizar en equipo?
El parque acuático de Aqualandia es un rincón único de la costa de Levante para exprimir la diversión. La combinación perfecta entre el baño en el agua y las atracciones consigue que todo el que lo visita tenga una experiencia inigualable. Aunque el parque dispone de una gran variedad de opciones que oscilan entre las atracciones infantiles, atracciones moderadas y atracciones radicales, son dos de ellas las más adecuadas para compartir en grupo, las que te harán competir y reír junto a los tuyos.
Uno de los escenarios más famosos de Aqualandia es el protagonizado por cinco refrescantes pistas azules paralelas que conforman un tobogán de una longitud de 85 metros. Este recorrido proporciona cuatro caídas alternadas con tres rectas y una caída en la piscina final. Las pistas blandas son ideales para organizar carreras con los amigos y proporcionan una excitante experiencia que varía según la posición de los participantes en su lanzamiento. Un consejo para llegar el primero, es colocarse completamente tumbado sobre la espalda con los dos brazos cruzados sobre el pecho y ambas piernas cruzadas y estiradas. De esta forma, la velocidad que se alcanza será mucho mayor y se tiene mucho más control de la dirección y del cuerpo. ¿Quién llegará antes? Con esta divertida atracción se pueden organizar múltiples competiciones con el equipo y repetir hasta ganar.
Si la meta es divertirse pero de una forma más moderada, otra de las atracciones para gozar en grupo es la multipista de 6 calles paralelas de color blanco conocidas como el Splash. Este tobogán ha sido testigo de numerosas aventuras de niños y adultos y no ha de descartarse como alternativa a realizar carreras y competiciones con amigos de una forma más suave. A diferencia de las pistas blandas, en el Splash la posición que debe adoptar la persona es boca abajo, tumbada y apoyada sobre una fina colchoneta con la que el cuerpo se deslizará sobre el agua como si de una pluma en el aire se tratase y cayendo en una piscina desde donde se podrá coger fuerzas para lanzarse de nuevo.
Aunque pruebes una, no dejes de probar la otra, pues ambas instalaciones ofrecen perspectivas diferentes y sorprendentes que no dejarán a nadie indiferente. Con una altura mínima de 1.25 metros en ambas atracciones, tanto jóvenes como mayores podrán gozar de una alta y excitante sensación de rapidez.
La velocidad y el agua son los dos ingredientes clave del parque acuático gracias a los cuales, el verano se torna diferente. Un día en Aqualandia es un día distinto, y sobre todo si se pasa con los más queridos. Ya sean amigos o familia, el disfrute en compañía siempre se hace más especial. No obstante, para los más independientes existen también otras atracciones con las que poder disfrutar en solitario y que se pueden descubrir en la web www.aqualandia.net.