Hemos cerrado las puertas de nuestro parque acuático tras un intenso verano, un verano en el que habéis disfrutado mucho y nosotros, más. Pues es para nosotros un placer año tras año ofreceros la mejor diversión.
Nos esforzamos cada temporada para seguir siendo un referente y cuando llegan estas fechas, como ya os dijimos, estamos un poco tristes.
Pero la tristeza es también esperanza para el próximo año, y para que en 2018 tengamos una temporada aún mejor es preciso cerrar bien esta. Tenemos que recoger y prepararnos para el invierno que llega y que no pasa de largo por nuestro parque. Aunque Aqualandia está en Benidorm hay meses en los que también tenemos frío, lluvias… Tenemos que estar preparados.
Nos esperan muchos meses cerrados, lo que no quiere decir que no tengamos actividad. Pero para estos meses en los que nuestras atracciones e instalaciones no están funcionando de cara al público es preciso tener unos cuidados especiales.
Lo primero que hacemos una vez finaliza la temporada es despedirnos de aquellos compañeros que no veremos hasta que llegue el buen tiempo y organizar al equipo que se queda al mando para recoger, organizar, arreglar y mantener el parque. Y como no nuestra seguridad que lo protege durante todo el año. Además, nuestros equipos comerciales, de marketing, dirección, gestión, nunca dejan de trabajar para mejorar Aqualandia y hacerlo llegar a todos vosotros.
Ha llegado el momento de guardar todos aquellos elementos movibles que suelen estar por nuestro parque acuático: sombrillas, hamacas, mesas, sillas, tablones de anuncios, expositores de productos… Los recogemos para que no puedan estropearse con la lluvia, el viento o el frío. Hacemos inventario, reparamos los que tienen algún desperfecto o sustituimos los que ya están muy deteriorados. Nuestros almacenes serán los custodios de todos ellos hasta que toque utilizarlos de nuevo.
Una vez hemos recogido todo el parque hay que limpiarlo, es algo que se hace a diario, pero esta es una limpieza mucho más a fondo. Las labores de limpieza serán continuas a lo largo del invierno. La limpieza llega a todos nuestros rincones y nuestras piscinas no van a ser menos, es el momento de vaciarlas y limpiarlas bien.
Además de la limpieza hay que proteger y tratar algunos de nuestros elementos. Taparemos con plástico y papeles diferentes infraestructuras para evitar que las inclemencias meteorológicas las dañen, oxiden… Será el momento de volver a pintar y de poner vaselina en algunas de nuestras atracciones. De esta forma, cuando llegue la primavera todo estará en perfecto estado.
Nuestros técnicos revisarán cada atracción, harán cambios de piezas, reparaciones, mejoras. Las revisiones son constantes y se hará una a fondo cuando llegue el momento de abrir, pero de eso ya hablaremos.
Nuestras zonas verdes también son muy importantes, nuestro equipo de jardinería realiza limpiezas y podas frecuentemente. Según el tipo de árbol o planta se realizarán unas acciones u otras para los meses de más frío. En los momentos determinados de estos meses de cierre también se aprovecha para plantar nuevas especies y replantar las que se han deteriorado.
Y una vez está todo recogido, empaquetado, tratado y dispuesto para los meses de inactividad es el momento de empezar con los cambios grandes. De hacer obras en los establecimientos, asfalto, tuberías. Es el momento de ir perfilando las novedades con las que sorprender la próxima temporada. ¿Qué será? ¿Una nueva atracción? ¿Un nuevo servicio? ¿Nuevas actividades?
Nos quedan meses de trabajo hasta que llegue el calor. Mientras os seguiremos contando todo por aquí y recordándoos que uno de los mejores parques acuáticos del mundo está aquí, en Benidorm, y no podéis faltar en el verano de 2018.